En el caso que utilices tu propio coche como medio de transporte para ir el trabajo hay que determinar quién va a pagar la gasolina y quién va a ocuparse del mantenimiento del mismo.
Si usas como medio de transporte el vehículo del empleador deberás mantenerlo limpio y en buenas condiciones. Procura que el seguro te cubra a ti en caso de accidente.
Cuando utilices el transporte público puedes negociar con tu empleador si él te pagará el abono transporte.